La acusada también indemnizará al SMS por apalear en 2006 en un centro de Cartagena a su doctora por negarse a recetarle más fármacos.
Han pasado cuatro años y el juzgado de lo Penal número 3 de Cartagena ya ha dictado sentencia. Antonia S. C., la paciente que en el año 2006 agredió a una doctora en el Centro de Salud Virgen de la Caridad (conocido popularmente como El Parchís), ha sido condenada a un año y nueve meses de prisión por ser autora de un delito por atentado y por otro de lesiones. Además, deberá indemnizar al Servicio Murciano de Salud (SMS) con 35.794 euros, que es el costo que ha tenido que asumir el Centro de Salud al sustituir a la facultativa.
Al principio el fiscal pedía para Antonia 2 años y medio de cárcel, mientras que la acusación particular, cuatro y medio. La pena impuesta a ésta se rebajó al llegar ambos letrados a un acuerdo.
En febrero de 2006, la condenada y su madre entraban en El Parchís. Todo parecía normal hasta que Antonia empezó a propinarle bofetadas y patadas a su médico por negarse a recetarles más medicamentos. No era la primera vez que intentaban conseguir de esa manera los fármacos. El día de antes, ambas se colaron sin cita previa en la consulta de su médico de cabecera. Le exigieron que le recetara unos determinados medicamentos y le amenazaron con pegarle. La doctora se vio obligada a atender sus peticiones para evitar ser abofeteada. Pero al día siguiente nada salió como madre e hija esperaban. Esta vez no transigió a sus peticiones y tras ser apaleada se refugió en la consulta de otra doctora.
A raíz de los hechos, los empleados del centro de salud protestaron con un parón de quince minutos en su actividad laboral. Asimismo, varias enfermeras se quejaron de que no era la primera vez que ocurría un suceso así. «Los administrativos sufren amenazas a diario», reconocía una de ellas. Con esta sentencia ya son tres las que se han dictado a favor de estos funcionarios públicos. El director general de Recursos Humanos del SMS, Pablo Alarcón, recuerda que dos se fallaron a favor de un médico y dos enfermeras y la tercera a favor de una auxiliar. Además, Alarcón considera que el Plan de Prevención de Agresiones a los Profesionales de la Sanidad de la Región es una «herramienta fundamental» para aumentar la seguridad de los trabajadores.
¿Cómo comportarse?
¿Qué hacer si es usted médico y un paciente se pone violento? ¿Cómo comportarse para que la situación no derive en una agresión? El Servicio Murciano de Salud aconseja mantener la calma y no responder a las provocaciones.